Besos, besos, que no nos falten besos… Las bodas son amor y los besos son amor. Por eso, cogido ideas que vemos sobre todo en pelis y bodas americanas, podemos instalar en la nuestra un kissing booth, un mostrador en el que se reparten, precisamente, eso: muchos besos.
[!adsenseamp!]
Sin duda en el kissing booth podremos hacer fotos chulísimas, muy originales y divertidas. Se pueden besar los novios, los invitados, niños y mayores, y se puede poner un tarrito para que por ejemplo dejen un céntimo simbólico para “comprar” el beso, o hacerlo gratis.
Hay quienes incluyen pintalabios de colores y sabores para que la gente ponga una nota de color y diversión al momento de los besos. Existen ya prefabricados por empresas especialidades en bodas que te lo llevan y te lo instalan donde se celebre el banquete o también podéis fabricar esta caja de besos vosotros mismos, totalmente personalizada y añadiendo vuestro toque único e irrepetible. Saldrá mucho más económico sin duda. A veces con un marco, un cartelito y una guirnalda de triángulos, o de flores, por ejemplo, es más que suficiente. O si se hace al aire libre podéis echar mano de lo que os ofrezca el propio espacio donde estéis celebrando vuestra boda.
Ejemplos de kissing booth
[!adsense!]
A continuación os dejo con una selección de kissing booth que me han gustado mucho. Como veis pueden ser besos de amor, de amistad, familiares… Y como podréis comprobar, las fotos quedan muy divertidas y originales. Podéis incluir, como en el caso del photocall algún complemento para que sea más divertido, con bigotes, gafas, corazones,… Podéis añadir unas chucherías, unas pompas de jabón, confeti… Imaginación al poder.
Esta idea es originaria de Estados Unidos cuando en las ferias instalaban este tipo de casetas para donar algo de dinero a una causa benéfica a cambio de besos. Y los kissing booth están cada vez más introducidos en las bodas, como digo, sobre todo americanas pero seguro que poco a poco los vamos viendo en las españolas.








Imagen principal vista en Te vas a quedar a cuadros